Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo

La buena gestión del aula pretende conseguir una mayor participación y reducir el nivel de desorden. Es necesario para conseguir buenos resultados, buena conducta y buenas actitudes. La gestión del aula, o la buena disciplina, se basa sobre todo en la prevención.

Pero, en realidad, ¿Qué es la gestión escolar? Según EMMER (1987) es un conjunto de comportamientos y actividades del profesor encaminados a que os alumnos adopten una conducta adecuada y a que las distracciones se reduzcan al mínimo.

A decir verdad esta lectura me gustó mucho porque no esta muy difícil ya que contiene conceptos muy sencillos de entender y contiene muchas cosas de provecho que podremos utilizar en nuestras prácticas en la escuela primaria.

A través de este texto aprendí que técnicas de gestión puedo utilizar para controlar la disciplina de un grupo cualquiera, por ejemplo dirigir la mirada al alumno causante de la indisciplina; también para realizar cambios de clase en el aula, tratando de no tomar mucho tiempo y siendo concretos en las indicaciones dadas; entre otras mas.

Ahora se que los principios de la buena gestión se han clasificado en las categorías de normas y expectativas, organización del aula, actividades en el aula y repuesta a la mala conducta.

Entre lo mas interesante del texto aparece que los factores de las causas del desorden son la pobreza, la escasa habilidad, los problemas emocionales y la influencia de los compañeros.

A partir de mi próxima jornada de observación y práctica docente trataré de implementar lo de establecer normas sencillas, claras, amplias y flexibles para aumentar el orden además de probar técnicas alternativas al castigo tales como ignorar, aprender del otro compañero y el humor entre otras.

Davis, Gary A y Margaret A. Thomas (1992) “la gestión del aula”, en Escuelas eficaces y profesores eficientes, Roc Fillela Escolá (trad.), Madrid, La Muralla (Aula abierta) pp. 113-126 y 142-145.